Foto: Osvaldo Aguilar / Jam MediaAlfredo Lee (4) huía ante la presión de Félix Buendía
Notimex
El Universal
Ciudad de México
Sábado 03 de noviembre de 2007
Cuando todo estaba preparado para la fiesta auriazul, el cuadro blanquiguinda despertó del letargo en el que estuvo durante casi todo el partido, y con una apoyo total en las gradas vencieron 28-21 a su rival felino en Ciudad Universitaria.
Desde muy temprano, la atmósfera fue adversa para los del Casco de Santo Tomás, y la confianza reinaba en las caras de los seguidores universitarios, quienes ya saboreaban una victoria como la ocurrida hace 15 días.
Pese a todo, la visita fue la primera en celebrar tras la escapada de Raúl Mateos, pero la alegría no duraría mucho, ya que Pumas remontó y se fue con una buena ventaja al mediotiempo, la cual parecía suficiente para salir con el triunfo.
La tensión en el tercer cuarto se vivió a la altura de la yarda 50 cuando, en la tribuna del "Palomar", un individuo ataviado con un disfraz de simio, animaba a los presentes con movimientos sugestivos que cautivaron a un policía.
Como verdadero primate, el "chango" se trepó en los asistentes y al más puro estilo de un "rock-star" recorrió las gradas del Olímpico Universitario ayudado con las manos por la afición puma, en una verdadera fiesta, que se encontraba lejos de presagiar la desgracia que acontecería en el terreno de juego.
Dos pases de anotación de Alfredo Lee fueron suficientes para acabar con el fervor auriazul y transformar la fiesta en un auténtico velorio para los seguidores locales, y los "Huelums" resonandron en el inmueble para dejar en silencio la tribuna de enfrente.
El último respiro de los universitarios se extinguió con la intercepción de José Luis Esteva, que dio lugar a la fiesta de los del Politécnico en territorio Puma, ante la incredulidad y las caras largas de la afición local por el marcador final de 28-21 en contra.
Viene de atrás IPN para derrotar 28-21 a la UNAM en el juego de comodines de la Conferencia de los 12 Grandes, disputado en el Estadio Olímpico Universitario
Notimex
El Universal
Ciudad de México
Sábado 03 de noviembre de 2007
El quarterback del Politécnico, Alfredo Lee, ingresó en la segunda mitad en lugar de Raúl Mateos y cuando todo parecía perdido vino primero con pase de 30 yardas a Luis Quiñones, y minutos más tarde con envío de cinco yardas a Hugo Canseco para darle la vuelta al marcador 22-21.
Con 50 segundos en el reloj, la UNAM intentó llevar el ovoide a distancia de gol de campo, que les permitiría sacar el triunfo dramáticamente y avanzar a semifinal, pero en su desesperación por conseguir la victoria, el pasador Francisco Alonso cometió un error y José Luis Esteba le interceptó pase para devolverlo 64 yardas y sellar la sorprendente victoria del Instituto Politécnico Nacional.
Desde muy temprana hora, el estadio Olímpico Universitario lució pletórico en el juego de comodines, donde por primera vez desde 1995 la UNAM y el IPN se enfrentaban en playoffs, bajo un ambiente totalmente festivo y con dos aficiones volcadas sobre su equipo.
La guerra de "Goyas" y "Huelums" enmarcó el encuentro donde los de blanco y guinda se pusieron al frente en una corrida personal de 65 yardas por parte de Raúl Mateos, quien engañó a la defensiva de Pumas con dar un pase optativo, para tomar la banda izquierda y escaparse hasta la zona de anotación.
Pumas CU respondió y con un pase de 86 yardas de Francisco Alonso a José "Vampiro" López tocaba la puerta del Politécnico al quedar en la yarda dos, y una jugada más tarde, Vladimir Araiza perforaba la trinchera para conseguir el touchdown del empate en la última jugada del primer cuarto.
El conjunto del Casco de Santo Tomás sumaba tres puntos a su cuenta con gol de campo de 26 yardas de Carlos Montes; pero el gusto duró poco, ya que Francisco Alonso conectó envío de 15 yardas con Araiza para darle la vuelta al marcador 14-10.
El momento anímico era de Pumas CU, quienes se separaron en el marcador con un pase de 28 yardas de Alonso a Jonathan Barrera. Todavía al final de la primera mitad, el "Vampiro" López dejó ir un pase de las manos cuando tenía el camino libre para irse hasta las diagonales y aumentar la ventaja de su equipo.
En el tercer cuarto, las defensivas impusieron sus condiciones y fue la UNAM el que tuvo oportunidad de conseguir puntos pero desgraciadamente Alfredo Castellanos falló un intento de gol de campo de 51 yardas.
Con poco más de cuatro minutos por jugarse en el partido, los pupilos del couch Arturo Alonso parecían tener todo bajo control, pero un balon suelto de Víctor Arellano fue devuelto por el linebacker José Luis Meza Matus hasta la yarda 12 de Pumas.
Los "goyas" inundaban el ambiente, un ruido ensordecedor hacía rugir el estadio Olímpico Universitario cuando Pumas CU detuvo en cuarta y 10 por anotar a sus acérrimos rivales y todo parecía completamente definido.
Pero el juego dio un giro de 180 grados cuando Alfredo Lee localizó a su ala cerrada Luis Quiñónes, quien tomó el ovoide para escaparse 30 yardas hasta la zona de anotación; un fumble de Vladimir Araiza dejó la mesa puesta para que Lee le diera la vuelta al partido con envío de cinco yardas a Canseco ante la algarabía de la afición politécnica.
El mítico estadio Olímpico Universitario era un volcán en erupción, el griterío ensordecedor impedía distinguir entre "Goyas" y "Huelums" cuando Francisco Alonso, quien había salido del campo por un fuerte golpe en el tobillo regresó al emparrillado para intentar hacer el milagro y darle el pase a la UNAM a semifinales.
No fue así. Alonso lo intentó e hizo soñar a los aficionados de Pumas con una victoria en los segundos finales, pero José Luis Esteba dijo lo contrario al interceptar pase, que devolvió 64 yardas para dejar tendidos a los de azul y oro, que con lágrimas en los ojos no podían dar crédito de la derrota.
El "cielito lindo" fue entonado por la porra del Politécnico, que se movía hacia un lado y otro, festejando este triunfo que quedará grabado en la memoria de muchos por su dramatismo, ahora las Águilas Blancas visitarán el estadio Tecnológico para enfrentarse a los Borregos Monterrey en una de las semifinales de la Conferencia de los 12 Grandes.
gdh
Ahora solo resta disfrutar un MUY dulce revancha.
FUENTE: http://www.eluniversal.com.mx/notas/458995.html
Imagen: Milenio.
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